En mi opinión:

Si eres novato puro: o bien tienes interiorizado un estímulo por aprender y progresar, o bien tienes en tu entorno alguien que sepa de fotografía para orientarte. De lo contrario el fracaso está asegurado. Comprarse una cámara+objetivo, sean buenos o regulares, no garantiza de por sí que puedas aprender más o menos (aprendizaje básico). Empezar por zooms o lentes fijas te puede llevar a realizar un tipo de fotografía u otra pero no a un mayor aprendizaje. Admito que la limitación de una lente fija puede propiciar el desarrollo de unos recursos naturales que la comodidad del zoom no puede dar. Pero no se aprende más con una lente fija.

Cada uno, al empezar, tiene un bolsillo más o menos grande. Si te compras algo de buena/alta calidad y eres perseverante, vas a tener unas herramientas cuyas limitaciones vas a tardar en descubrir y por tanto las rentabilizaras bien en el tiempo. Si por el contrario la afición decrece, acabaras olvidando tu equipo en el armario porque el móvil es más fácil y no pesa. En el otro lado, si te compras una cámara de iniciación más económica y te dedicas a ello con la misma ilusión que el primer día, cuando hayas adquirido una cierta experiencia y veas que la cámara te queda corta puedes optar por un mejor equipo. Puedes quedarte éste como un segundo equipo o bien venderlo para adquirir otro de mayores prestaciones. (sea nuevo o de 2ª mano) Eso si, en caso de no poder mejorar todo el equipo, mejorar los objetivos es lo primero (esto está escrito en las piedras del Neolítico).

Para no alargarme más resumo: En mi opinión, el equipo de inicio tiene más a ver con las ganas de profundizar en esta bendita y cara afición que con un mejor aprendizaje.